...hemos alcanzado las más altas cotas de miseria

La frase completa (junto con la de la semana pasada) es de Groucho Marx.

Esta semana comienza como continuación de la anterior. El Lunes salí por la noche, horita y media, de noche. El pulso subió un poco más de lo debido, 164 de media (sigue altísimo) a pesar del esfuerzo subjetivo muy contenido. Me noté dolorido, lo atribuí a haber salido varios días seguidos. Por la noche dormí fatal. Como si hubiese hecho un entrenamiento muy duro. Me propuse limitar seriamente el pulso en entrenamientos posteriores. Al menos el ritmo en esta salida ha llegado a 7:02, aunque en las cuestas de la M100 bajo hasta 9:00 !!

Resulta que estaba incubando un catarro. Si tengo algo de fiebre, es sólo alguna décima por la tarde, pero es suficiente para que me duela la garganta, las rodillas, los codos, los dedos, el cuello...

Eso explica además el pulso alto que no mejora.

El Martes no pude levantarme y salir, me encontraba mal. Pero ayer me apetecía salir por la noche, me abrigué bien (para sudar) y salí una hora, MUY despacio, a 7:21 (mi salida más lenta). 162 pulsaciones (posiblemente por el catarro), pero en general buenas sensaciones. Me sentó genial y dormí muy bien. El peso anda ya por 75.6 Kg, la mayoría de la reducción la achaco a la disminución de depósitos de azúcar, o sea que no creo que siga perdiendo peso a ese ritmo. Hoy me encuentro mucho mejor que ayer aunque sigo con molestias de catarro.

Ya han caído 22 Km de trote cochinero esta semana.